CAMINO DE SANTIAGO 2009

Etapa 4: DE VILLAFRANCA DEL BIERZO A O CEBREIRO


Sábado, 9 de Mayo de 2009

Desayunamos a las 8:30. Hoy íbamos a llegar al Cebreiro así que había que alimentarse.

Ángel,  Luis y Chema partieron los primeros. Paco y yo aún tuvimos que realizar una I.T.V. a las muchachas catalanas acompañados de Jesús, que estaba a la espera por si surgía alguna necesidad. Aprovechamos para deshacernos de las mochilas en el coche de apoyo con la idea de, por una vez, poder admirar el paisaje de la subida al Cebreiro, sin carga a nuestras espaldas.

 

Con Jesús y el coche de apoyo.

Salimos tras nuestros compañeros hacia La Portela siguiendo el carril de la carretera adaptada para los peregrinos. Paco se va quedando rezagado. Llego a La Portela cansado, con la sensación de una inminente pájara. Nuestros compañeros ya se han apretado un plato combinado de fiambre.  

Mientras Sonia, la hija de los propietarios, que en una ocasión hacía ya varios años no había querido salir en nuestras fotos, me prepara un buen bocadillo, aparece Jesús con el vehículo de apoyo. Poco tiempo después llega Paco, con los bolsillos ocupados por mondas de naranja que se había venido apretando por el camino. 

En el Paraiso del Bierzo.

Pronto emprendemos el Camino hacia Las Herrerías, pues teníamos previsto comer en La Fragua. Ángel, Chema y Luis se detienen en El Paraíso del Bierzo, donde saludan a los dueños y toman unas cervezas. Por mi parte, ni me detengo. Solo tenía ganas de llegar y encontrar una fuente donde calmar la sed y el cansancio. A la salida de Las Herrerías hay una fuente al lado de un gran árbol. Me tumbo en el murete con los pies en alto mientras hago tiempo hasta que llegue Paco. Quince minutos después aparece y continuamos andando. Esta vez fue Paco quien me dejó atrás.

A nuestra llegada a La Fragua ya están finalizando de comer Ángel, Luis y Chema. Mientras Paco se queda comiendo atendido por Cristina yo me pido una botella de agua y me voy directamente al coche de apoyo a tumbarme para estar bien en la subida al Cebreiro que nos espera. Los demás aprovechan para echar una partida de mus. Como ya va siendo habitual, son Chema y Luís quienes pierden ... y pagan.

Chema desde el alto del Cebreiro

Sobre las seis de la tarde comenzamos la subida. Cuando llegamos al pueblo nos esperaba ya Jesús con alojamiento negociado pues teníamos intención de ver el partido del Madrid contra el Valencia y seguro que llegaríamos tarde al albergue de peregrinos, que cierra a las diez.

Paco, reconocido madridista, con intención de adecentarse para el partido, le pide a voces desde la bañera a Jesús que le suba la bolsa del Corte Inglés donde lleva la ropa limpia. Jesús se lo pide a Luís a su vez y este le entrega a Jesús la bolsa del Corte Ingles repleta de ropa sucia. Jesús, algo extrañado porque le pidiera la ropa sucia, se la entrega a Paco. Después de reirnos un buen rato salimos con intención de cenar para después ver el partido.

Paco “de guapo” delante de la iglesia

Buscamos un bar donde ante un gran monitor vimos el encuentro. El resultado fue de 3 a 0 favorable al Madrid. Una vez finalizado, después de comentar las incidencias, pronto nos retiramos a descansar.