SANTIAGO: Viernes, 14 de Mayo de 2010


Sólo Paco y Chema deciden cumplir con el programa previsto en nuestra Guía de este año por lo que los dos madrugan para comenzar la etapa de 34 kilómetros desde Finisterre hasta Muxía. El resto, nos quedamos en las camas tranquilamente dormidos. El autobús que nos llevaría de Finisterre a Santiago no sale hasta las 12:00 de la mañana.

Esperando el autobús para Santiago

Después de desayunar y dar una vuelta por el pueblo nos vamos a la parada del autobús. Comienza a llover.

En el autobús

El autobús recorre despacio las estrechas carreteras gallegas bajo la lluvia mientras va dejando atrás bonitos pueblos, algunos de los cuales ya conocemos.

Noia

Consumimos en el viaje hasta Santiago de Compostela algo más de tres horas.


Cuando llegamos a la estación de autobuses, Ángel se va a buscar a su familia y a algunos amigos que han venido desde Segovia a buscarnos. Luís, Primi y yo, mientras tanto, caminamos por las calles de Santiago en busca de un lugar donde comer algo.

Comida, en Santiago

Después de comer paseamos por la Plaza del Obradorio y nos encaminamos, por la Rua Do Franco, a la pensión que tenemos ya reservada con intención de asearnos algo y dejar allí las mochilas.

En la Plaza del Obradoiro

Visitamos la Oficina del Peregrino con intención de recoger "La Compostelana". Aunque nos ponen pegas para entregárnosla, pues no hemos llegado caminando a Santiago como es preceptivo, me cambio de ventanilla, y la consigo.


Regresamos de nuevo a la Catedral por calles muy concurridas de Santiago, deteniéndonos de vez en cuando a tomar algunas fotos. En la puerta de la Catedral muchos peregrinos guardan cola para visitar al Santo.

Foto en la fuente (peligro latente)

Fachada de la Catedral. Detrás, el grupo de las suecas

En la Plaza del Obradoiro encontramos a una de las dos alemanas que hemos conocido durante las etapas de estos días. Nos fotografiamos con ella.

Con la alemana

Con la alemana

Como en ocasiones anteriores, visitamos el magnífico Hostal de los Reyes Católicos, donde aprovechamos para tomar unas cañas.

Hostal de los Reyes Católicos

No podía faltar nuestra acostumbrada visita anual a nuestras amigas que siempre nos esperan, fieles, en el parque de la ciudad.

Nuestras fieles amigas

Despedida de soltera en Santiago

Caminamos de nuevo por la ciudad mientras hacemos tiempo para reunirnos con Ángel y el grupo de segovianos, con quienes, antes de cenar, tomamos unos chatos. Poco después iríamos todos a cenar a un conocido restaurante.

Cena con los segovianos

Después de la cena, paseamos hasta la Plaza del Obradoiro, tomamos unas copas en algunos locales como el Gato Negro, el Séptimo Cielo y el Modus Vivendi, ya conocidos por nosotros en visitas de otros años, y nos retiramos a la pensión a descansar dando por finalizado nuestro Camino de este año.

En la puerta del Modus Vivendi

A la mañana siguiente, después de realizar algunas compras, Chema, Primi, Paco y yo nos hemos trasladado en taxi al aeropuerto para tomar el avión que nos trasladaría a Madrid. El resto del grupo regresaría el día siguiente, domingo.

El avión de Ryanair

Juan Pablo y Señoras

Días después recibiríamos un correo electrónico de Ana y Elena, ya en Santiago, en el que nos saludan, nos comentan que han llegado sin incidencias, y nos envían algunas fotos del día que estuvieron con nosotros.

Ana y Elena, en la Plaza del Obradoiro